Arranca la temporada de manzanas europeas en Ecuador

Empezó una nueva temporada de manzanas francesas en Ecuador. “Europa nunca demasiado green. Manzanas de Francia, buenas para la tierra, buenas para ti” es una campaña, que surge por iniciativa de la Unión Europea e Interfel y promueve el consumo de manzanas francesas en el país. Esta temporada de Manzanas francesas brinda un producto de calidad excepcional para los ecuatorianos, un aporte significativo al bienestar del país.

Ecuador ha registrado un notable incremento en sus importaciones de manzanas. En 2022, el país importó aproximadamente 51,4 millones de dólares en este producto, y en 2023 la cifra creció un 13% en comparación con el año anterior. De estas cifras, el 20,64% de las manzanas importadas provienen de Europa, representando un valor de 10,6 millones, según datos del Observatorio de Complejidad Económica. Este crecimiento subraya la relevancia de las manzanas importadas y la preferencia de consumo de productos saludables de los ecuatorianos. Además, destaca la importancia del mercado europeo, en la oferta de productos de alta calidad que complementan la producción local, asegurando así la disponibilidad y diversidad de opciones para satisfacer la creciente demanda de los consumidores locales.

La producción de manzanas en Francia y su impacto en Ecuador

Con una cosecha de 1,463 millones de toneladas en 2024, la producción de manzanas en Francia se ha mantenido estable en comparación con el año anterior (1,508 millones de toneladas). Esta estabilidad garantiza el suministro continuo de estas frutas a mercados internacionales como el colombiano, ecuatoriano y brasilero. A continuación, compartimos las cifras de producción de las variedades francesas más destacadas que ahora están disponibles en Ecuador

– *Gala*Con una producción de 251,000 toneladas, ha disminuido un 7% respecto a 2023. Sin embargo, sigue siendo una de las variedades más versátiles y populares.

– *Granny Smith*Con 101,000 toneladas producidas, presenta una disminución del 26.3%, y es conocida por su característico sabor ácido.

– *Pink Lady*Con 164,000 toneladas, ha visto una caída del 5% en comparación con el año pasado, pero sigue siendo apreciada por su dulzura y textura crujiente.

Cada una de estas variedades ofrece a los consumidores ecuatorianos la posibilidad de disfrutar de manzanas de alta calidad, adaptándose a diferentes gustos y necesidades culinarias, desde un snack saludable hasta un ingrediente esencial en recetas gourmet.

Desafíos climáticos y sostenibilidad en la producción

A pesar de las condiciones climáticas adversas que han afectado a gran parte de Europa del Este en 2024, la cosecha francesa sigue siendo sólida. Sin embargo, la cosecha europea en su conjunto será la segunda más pequeña de la década (con 10,2 millones de toneladas, o 1,3 millones de toneladas menos que el año pasado), impactada principalmente por las heladas. A pesar de este desafío, Daniel Sauvaitre, Productor de manzanas y Presidente de Interfel, ha señalado: «El suministro francés, estable para la cosecha de 2024, lo que nos permitirá satisfacer nuestras necesidades de exportación, y será un actor importante este año en un contexto de bajas cosechas de nuestros vecinos europeos».

Calidad y trazabilidad desde Francia hasta Ecuador

Las manzanas francesas se producen bajo los estrictos estándares de la **Asociación Nacional de Manzanas y Peras** (ANPP), lo que garantiza su calidad y trazabilidad. Desde los huertos en Francia hasta los puntos de venta en Ecuador, cada manzana sigue un proceso riguroso que asegura métodos de producción respetuosos con el medio ambiente en el huerto y trazabilidad perfecta de la fruta. Este compromiso con la calidad permite que los consumidores confíen en el origen de los productos que consumen.

Las manzanas francesas se producen respetando el medio ambiente y la biodiversidad al mismo tiempo, para preservar los recursos naturales, creando un modelo de producción agrícola sostenible.

La ANPP ha sido pionera en la implementación de buenas prácticas en los huertos a finales de los años 90 y de la Charte Vergers écoresponsables, reconocida por el Ministerio de Agricultura francés en 2013, garantiza que la producción de manzanas se realiza de manera responsable. La etiqueta **Vergers écoresponsables**, que identifica las producciones sostenibles, está presente desde 2010 y se ha expandido a otras frutas como los duraznos, nectarinas y, próximamente, las ciruelas.

En conclusión, la llegada de esta nueva temporada de manzanas francesas a Ecuador no solo refuerza los lazos comerciales entre ambos países, sino que también brinda a los consumidores acceso a productos de alta calidad, cultivados con un enfoque sostenible. Así, “Europa nunca demasiado green. Manzanas de Francia, buenas para la tierra, buenas para ti” se convierte en mucho más que un simple lema; es un compromiso real con el bienestar del consumidor y la protección del medio ambiente, que impacta positivamente tanto a nivel local como global.