Cultura, ¿un tema sin importancia?
12/10/2020Hasta siempre amigo Rubén Darío Soliz Cabrera
14/10/2020Admito que me gusta el fútbol y me reconocí como un “animal futbolizado”. Pero no llegué al extremo del fanatismo: que sea de vida o muerte.
Hay muchas expresiones de lamento porque no podrán ver los partidos de la selección ecuatoriana de fútbol en estas “eliminatorias” (sic). Quejas innecesarias. Si no vemos los partidos de la selección u otros, no nos vamos a morir, y en esta pandemia pasamos meses sin fútbol y no se acabó el mundo.
Hasta habría mejor provecho. Ese tiempo dedicado al televisor puede ser bien invertido: leer, hacer deporte, etc. Pueden ser dos horas útiles Y que tal si el resultado es negativo: “lastimita de plata” y de tiempo. Eso es peor: pagar para ver perder, pagar para “morirse de las iras”.
El fútbol es negocio, y lo es gracias a que hay una masa de consumidores, y eso se explota. Pero si le damos máximo la importancia de un deporte, y no de religión ni de producto de primera necesidad, los mercantilistas no tendrán cabida y volverá a ser asequible para todos.
Para el fútbol industria no hay hinchas sino clientes, y aprovechan las circunstancias para abusar de ellos. Entonces en nosotros está en no alimentar esa voracidad.
Por mi parte no tengo nada que lamentar y no gastaré un centavo. Si hay otras prioridades, y más en esta época crítica por la que atravesamos la mayoría. (O)