Los nombres y apellidos que en la actualidad sirven para individualizarnos, en su origen destacaban el lugar de procedencia, las características físicas, las virtudes, los defectos, la apariencia o la profesión de las personas. Eran una suerte de apodo o sobrenombre.
Esto se deprende de una amplia investigación efectuada por el filólogo y catedrático cuencano, Oswaldo Encalada, recopilada en el libro ‘Antroponimia de origen no hispánico en el Austro ecuatoriano’, publicado a finales de noviembre de 2014.
Según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos, INEC, en el Austro los apellidos más comunes y que datan de la era prehispánica son:
“El decir no hispánico quiere decir que puede ser kichwa, cañari o un mestizaje kichwa-cañari; hay nombres que vienen de provincias de la Sierra centro y de la Sierra norte y también de la Amazonía”, señaló Encalada en una entrevista en 2019.
Entre los apellidos que vienen del norte del país, debido a los traslados que se efectuaba a los policías y militares, cita apellidos con raíces Taxi, Paxi o Luisa.
Asimismo, precisó que dentro del componente indígena el 90 % de apellidos es de origen kichwa, un 7% u 8% es cañari y el resto del Oriente y de la Costa.
“La mente humana es una sola, si la cultura europea creó apellidos por las profesiones o apodos, lo mismo hizo el Kichwa”.
Oswaldo Encalada.
El español toma adjetivos y así llama a las personas, por ejemplo, Moreno, Rubio, Veloz. En el kichwa se destaca Sinchi, que significa fuerte, valeroso; o define profesiones como Chapa, que quiere decir vigilante o guardián. Por lo tanto no es un insulto pues viene del vocablo kichwa ‘Chapar‘ que significa espiar, vigilar, mirar, cuidar.
En su investigación, Encalada empleó registros de datos que empezó a recopilar en 1981, a través de los padrones electorales que se publicaban en los diarios cuencanos. E ilustró el libro con gráficos del diccionario kichwa de Luis Cordero y del texto ‘Nueva corónica i buen gobierno’ del indígena Guamán Poma de Ayala.
Mitimaes
Encalada destaca además que a través de la investigación se pudo reconocer a los pueblos mitimaes, como se denominaba a aquellos indígenas que eran enviados por el imperio inca a sitios estratégicos para cumplir funciones a su servicio.
Esto se evidencia en apellidos que hacen referencia a lugares del Perú, como Huanca, Cajamarca, Rocano, Chaucha, Uguña y Cuzco, entre otros.
El investigador concluye que la sociedad es profusamente mestiza y ha integrado de forma armónica a los componentes indígenas.
A continuación, les presentamos una lista de los apellidos y su significado, según la investigación de Encalada:
DATO
El investigador Oswaldo Encalada atribuye la alteración de las formas originales de los apellidos a la negligencia de los encargados del registro e inclusive por la aplicación de la tecnología.