Con una inversión de más o menos 500 dólares, unos 30 judocas cuencanos volvieron a entrenar en el Dojo del Complejo Deportivo Bolivariano, ocho meses después.
Y es que la pandemia del Covid19 no ha pasado, pero los deportistas, en conjunto con los padres de familia y los directivos de la Federación Deportiva del Azuay, FDA, vieron la necesidad de readecuar las instalaciones del Dojo para que los judocas pisen el tatami 200 días después de haber cerrado las puertas por la emergencia sanitaria.
Martín Prado, entrenador del arte marcial manifestó que gracias a las aportaciones que hicieron los padres de familia, se pudo regresar al gimnasio. “Una vez que se iban abriendo varios establecimientos, hace dos meses decidimos presentar un protocolo de bioseguridad para que el judo también pueda reanudarse.
«En medio de la pandemina, los entrenamientos pasaron a realizarse de manera virtual por las plataformas y 15 días atrás nos reunímos en los parques lineales de la ciudad», remarcó.
Para eso, se readecuó varias zonas, se adquirió lavadores, dispensadores y otros implementos electrónicos; además en el tatami se adecuó para que 14 deportistas entrenen manteniendo el distanciamiento y uno o máximo dos entrenadores por sesión”, acotó Prado.
El retorno se dio el pasado fin de semana, al primer día llegaron 32 judocas desde los 11 años en adelante. “Este es el número de equipo de competencias, pero aspiramos a que puedan llegar el resto de deportistas de todas las categorías”, remarcó. (D)
