Elevar los estándares de higiene todavía es una preocupación del escenario post pandemia

Cada dos años desde 2008, Essity compañía líder en higiene y salud ha realizado investigaciones en todo el mundo recopilando casos y opiniones sobre una amplia gama de áreas de higiene y salud; todo con el objetivo de romper estigmas y tabúes existentes que repercuten negativamente en la vida de las personas. 

Este año la “Encuesta Global de Higiene y Salud” se enfoca en el futuro del bienestar, examinando la brecha de conocimiento relacionada con los temas de higiene y salud; comparando conductas y actitudes actuales de las personas sobre cómo les gustaría vivir en el futuro. 

Los hallazgos se basan en respuestas de más de 15.000 personas de 15 países, incluidos Colombia, Brasil y México, identificando varias brechas en áreas como el cuidado personal, provisión de cuidados, preocupaciones por la salud y consumo sustentable.  

“El mundo está evolucionando y cambiando a gran velocidad. Nuevas pandemias y otros desafíos globales afectan nuestra salud y bienestar. Hemos realizado esta encuesta debido a que queremos avanzar para el bienestar de las personas y crear conciencia de la importancia de la higiene y la salud y su conexión con el bienestar. También, al mirar al futuro del bienestar, buscamos seguir rompiendo barreras por el bienestar y encontrar soluciones para una próxima generación más saludable”, dice Joséphine Edwall Björklund, vicepresidenta Senior de Comunicaciones en Essity.

La Encuesta aborda seis temáticas, entre ellas el futuro del cuidado personal, donde el 67 % de los encuestados afirmó experimentar alguna barrera para vivir de forma más saludable y en la que el tiempo y la motivación son las dificultades primarias. De igual manera, entre los hallazgos más significativos sobre el futuro del cuidado sobresale la percepción positiva (61 %) de los servicios digitales y la atención primaria, que le permiten al cuidador ahorrar tiempo que puede dedicar a los pacientes.  

Por su parte, el diálogo a futuro sobre la higiene corroboró la importancia de las escuelas en la promoción de conversaciones necesarias que permitan reducir la vergüenza y reticencia de hablar de temas de salud e higiene. La falta de conocimiento y diálogo puede fácilmente resultar en estigmas sobre la salud e higiene, creando condiciones tales como el tabú de la menstruación. 

Por último, el 61 % de los encuestados consideran que el consumo responsable es una asignación individual. No obstante, tan solo el 36 % está dispuesto a pagar más con tal de vivir sosteniblemente y está disposición disminuye a mayor edad.  

Los resultados de la encuesta muestran que los cuidados a la salud, educación y diálogos accesibles deben ser abordados para mejorar la salud tanto en lo colectivo como en lo individual. Durante muchos años, Essity ha hablado acerca de la importancia del bienestar personal y de los cuidados preventivos, muchas veces a través de alianzas con organizaciones como UNICEF para crear conciencia en una escala global.  

“Seguiremos enfocándonos en brindar soluciones inteligentes que contribuyan a la salud e higiene personal y pública, y continuaremos hablando acerca de las condiciones de higiene personal para romper estigmas y tabúes. Alentamos a otros actores a que se unan en nuestros esfuerzos”, complementó Edwall Björklund.